Autor:Sergi Llauger
Género:Ficción
Leído: febrero2013
SINOPSIS:
El día en el que morí, fue el
día en el que casi perdí la poca humanidad que quedaba en mí. La eterna promesa
de marcharme como un espíritu en paz jamás me llegó, y, en lugar de eso, me
convertí en un alma errante, arraigada a las entrañas de esta tierra baldía.
Algunos diríais que sonreírle a la muerte tan de cerca debería ser algo
glorioso, pero no hay nada de glorioso en esto. Tan sólo un siniestro y profundo
vacío interior. El destino me hizo caminar entre demonios sin la necesidad de
temerles. Me permitió contemplar el sol sin apartar la mirada hasta el reinado
de la noche. Puso el peso de este mundo a mis espaldas, y también quiso hacerme
recordar lo que es amar… lo que es decidir que el ser humano merece una segunda
oportunidad. ¿Hubo alguna vez un motivo para tantas leyes rotas? Quién sabe…
Dejad que os hable de un viaje fascinante y de tierras lejanas; de lealtades
inquebrantables y de criaturas inimaginables. Me llamo Erico Lombardo, y soy un
ser condenado a tener conciencia de sí mismo. Puede que, después de mi muerte,
aún siguiera quedándome una última cosa por
hacer..."
Nota particular:Extraordinariamente mi impactó, no pude dejar de leer hasta que llegué al final, a veces me imagino un mundo así y pienso si quedará de verdad alguien con tantos sentimientos humanos.
El día en el que morí, fue el
día en el que casi perdí la poca humanidad que quedaba en mí. La eterna promesa
de marcharme como un espíritu en paz jamás me llegó, y, en lugar de eso, me
convertí en un alma errante, arraigada a las entrañas de esta tierra baldía.
Algunos diríais que sonreírle a la muerte tan de cerca debería ser algo
glorioso, pero no hay nada de glorioso en esto. Tan sólo un siniestro y profundo
vacío interior. El destino me hizo caminar entre demonios sin la necesidad de
temerles. Me permitió contemplar el sol sin apartar la mirada hasta el reinado
de la noche. Puso el peso de este mundo a mis espaldas, y también quiso hacerme
recordar lo que es amar… lo que es decidir que el ser humano merece una segunda
oportunidad. ¿Hubo alguna vez un motivo para tantas leyes rotas? Quién sabe…
Dejad que os hable de un viaje fascinante y de tierras lejanas; de lealtades
inquebrantables y de criaturas inimaginables. Me llamo Erico Lombardo, y soy un
ser condenado a tener conciencia de sí mismo. Puede que, después de mi muerte,
aún siguiera quedándome una última cosa por
hacer..."Nota particular:Extraordinariamente mi impactó, no pude dejar de leer hasta que llegué al final, a veces me imagino un mundo así y pienso si quedará de verdad alguien con tantos sentimientos humanos.
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